miércoles, 20 de junio de 2012

XLIV.



cada vez con mayor frecuencia
me encuentro
en un intento por repararme
donde la música decapita puntas de icebergs


la asiduidad del gris es coetánea


el resto es un bostezo inútil
por no tropezar tres veces


y una piel quemada al sol que recuerda una voz en formato gemido


después la lluvia
que pasa sin ser invitada
e invade las lámparas de un salón vacío


transmitir es algo en lo que trabajo


arranco pestañas al miedo


decidí que un barrio tranquilo no arquearía más mi espalda


borrar las huellas de los despropósitos
no es suficiente


las cicatrices
en ocasiones
pueden gritar hasta ensordecernos


poema inédito de Ángel Muñoz y foto extraída de la red

2 comentarios:

Lanzadera dijo...

Y si lo dices así, yo solo digo: AMÉN.

Ángel Muñoz dijo...

Es que son las únicas palabras que he encontrado, prima.