camiseta
la camiseta roja
con la cara
mil y una veces reproducida
del Ché
campeaba libre
sobre su grueso torso
intentaba razonar
con tres mujeres
asidas a su carro de la compra
sobre la importancia
del guerrillero
en la historia
las señoras
no daban crédito
ni puta idea de historia
ni puta idea del Ché
y lo que es más peculiar
ni puta idea de quién era
aquel tío
que quería darles palique
le dejaron a solas
con su soliloquio
del combatiente
destinado al buzón
que cortaba el paso
en la estrecha acera
mal adoquinada
no tuvieron reparo
en golpearme
imagino que sin querer
al pasar por mi lado
con el carrito
burlándose
del monologuista
que cambió el buzón
por la papelera quemada
quise explicarle
al tipo
hablemos claro
gordo
que no iba a convercer a nadie
que su metralleta silábica
estaba siendo tan estéril
como los intentos del Ché
por hacer de este mundo
algo mejor
sí
ya sé que trató de lograrlo
por todos los medios
pero sólo nos queda
gente que te golpea con el carro
que te empuja en el metro
o que no escucha más que su ego
mientras otros
departen
con los únicos
que pueden atender
y no fusilarlos
no sea
que su rostro
también aparezca
estampado
tras los años
en alguna camiseta
Texto inédito de Voltios (Ángel Rodríguez).
P.D: Más abajo, un evento del que me ha llegado el eco a última hora. Lo cuelgo, por si lo lees, y te apetece ir.
10 comentarios:
Demasiado miedo a ver tu cara en una camiseta y muy poco respeto por el loco que luchó por ti.
Ni las guerras son buenas, ni todo lo que hizo el Ché fue bueno, ni todo lo que hizo Franco malo.
A cada uno lo suyo pero lo que está claro es que se debiera ir por la calle con menos miedo a que tu foto sea parte de la historia, porque la historia de mañana es hoy.
Porque nuestra época será humanos acojonados por los políticos, funcionarios y otras hierbas.
Tengo un poco de fiebre me ha dicho mi novia que a veces deliro.
Un abrazo Angel
Estamos hoy en onda, yo creo que cada uno vaya como vaya merece ser tratado con respeto y a fin de cuentas, se retrata por sus actos, "por la boca muere el pez"... Lo que me da pena es que además de ignorantes tienen el síndrome del imprudente.
Arrumacos pasados por agua.
Gracias por tus generosos comentarios.
Curioso poema tengo que leerlo con mas detenimiento.
Saludos!
Solo nos queda
gente que te golpea con el carro
que te empuja en el metro
o que no escucha mas que su ego, Dices
yo escucho, y pienso
Quedan las sonrisas de las mañanas
los tangos de aquel hombre del metro
los violinistas desprovistos de publico aficionado
quedan, las dos migas de pan de mi paciencia
la esperanza de colores
los vientos de poniente susurrando algo mejor
Queda, aquel que narra y aquellos que escuchan, los que no fusilan con la mirada, sino mas bien te hacen el amor con las pupilas.
Un abrazo Voltios, hoy tuve un dia horrible pero no me resisto a seguir siendo optimista, al menos no hoy.
El Ché un guerrillero que hizo historia ayer y hoy
besos ángel
chicos sólo deciros que creo que con este poema no he conseguido llegar a donde pretendía, o expresar la anécdota que ocurrió en la calle delante mía, cachis, aún así agradezco comentarios y estoy abierto a debates, pero no políticos, jejejejejeje. un fuerte abrazo señor pascual (hacía mucho que no te veia por el mundo blogger),
bego (arrumacos a estas horas de cereales y frutas), santi-rémora por dejarte caer por mi blog, calipso-paz (por lo de siempre, por leerme, etc, a ver si puedes venir el día 30) y a ana-escalera ( gracias por leer mi blog como yo leo el tuyo, mil gracias)
angel
Lo del mercadeo con el Ché siempre me ha pareccido una vergüenza
Sólo escucha el que quiere escuchar.
O dicho de otra manera -cuando le pique a él, entonces se preocupará de arrascarse- jeje
SALUDOS DESDE LA TABERNA DEL CRÁPULA.
estoy contigo en ello maestro zu, que tal la voz?
justo, ese es el sentido del poema paco, un placer que te dejes caer desde tu taberna por mi cuchitril, de veras tío, a ver cuando nos echamos a la cara pa tomar unas cañas.
abrazos. voltios.
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