jueves, 3 de noviembre de 2011

Vivir sin Eduardo, una novela corta

Ando a vueltas con una novela corta y creo haber encontrado el camino, eso sí, debo de maquillarla mucho aún. Pero aquí os dejo el inicio y su esbozo inicial, espero os guste:




VIVIR SIN EDUARDO

1.

Cinturón naranja de kárate. No daba crédito. Ahora si que podía enfrentarse a ese par de mierdas que no eran capaces de jugarse el tipo en solitario con él al finalizar las clases. Sin corrillos de por medio, sin chicas que rían ante la derrota.

Durmió bien, especialmente bien, contemplando el póster de Bruce Lee pegado a la puerta con celofán.

2.

Ana María le había pedido cautela, con vulgaridad, a su modo.

- ¡Joder Edu!, ¿dónde coño vas ahora con la que cae?

Y era cierto. Ni gorra ni agua. Un polígono industrial y él. Sólos. Arriba el Lorenzo causaba estragos. El paso corto. La manga larga. Un tubo de escape. Los treinta y dos a la sombra. Otra interrogante sin resolver a sus súplicas.

Alguien circulaba con la ventanilla bajada y algo de calorreo en la radio a toda pastilla. Por su calle no era. Quizá la paralela, la de arriba o la de abajo. Vete a saber.
Comparar a esas horas el polígono con un desierto no era descabellado. Esbozó una sonrisa sorprendiéndose del placer que aquella música daba a sus tímpanos. La alegría del alma pese a la flojera.

Una higuera medio desnuda ofrecía cobijo en la acera, en un cruce, cien metros a ojo, más o menos.
Irguió la espalda, los ojos fijos y el paso decidido como aquel día en el patio del colegio en el que le abrieron una ceja. La única vez que alguien, al descuido, le abrió una ceja. Un bolígrafo certero, de esos transparentes que costaban veinte pesetas, le hizo ganarse el respeto clavándose en el antebrazo rival. El respeto y la expulsión....

5 comentarios:

virgi dijo...

Empieza bien.
Bueno, como me tienes conquistada...
Besos

Ico dijo...

Me gusta.. ligera, rápida, desde dentro, un personaje con visceras.. espero que tengas suerte.. besos

Ángel Muñoz dijo...

Gracias Virgi, siempre por aquí y yo con tan poco tiempo, un beso.

Ángel Muñoz dijo...

Más o menos Ico, gracias. Eduardo es, tristemente, un personaje real, con vísceras y mucho que dar de si mismo. Un abrazo y gracias por pasarte por aquí.

Mayte Sánchez Sempere dijo...

Eso, tú escribe novelas en lugar de mandarme relatos para el blog de la revista... :P

Ánimo con la novela, yo llevo con la mia un año y tan pronto me secuestra como se me escapa, es un martirio, pero un martirio maravilloso :)

Besos, nos vemos pronto.