la platanera
no reuníamos
el valor suficiente
para adentrarnos en él
era terreno hostil
y con esa clase de términos
nuestras madres
trataban de alejarnos
de un
más que probable
mal encuentro
el caso
es que el nombre
no producía pavor alguno
la platanera
así de sencillo
se trataba de un descampado
de los que hoy no existen
en decenas de barrios
lugar donde dejar
sin ataduras
mentes pueriles libres
servía de campo de batalla
para conflictos
entre vaqueros e indios
ejércitos
o isla del tesoro
y digo tesoro
porque en las pocas incursiones
siendo muy críos
monedas
cromos
o chapas
tal vez dejado por otros
se acunaban
en nuestros bolsillos
hasta que fuimos descubiertos
los cuatro
volviendo de una correría
por mi madre
que tornaba del ultramarinos
no volví a pisarla
la platanera
mis tres amigos sí
tiempo después
tal vez
a los quince
o dieciseis años
para seguir peleando
con palos
con tubos de hierro
golpeando
con saña
las almas débiles
de los yonquis
los que por cojones
debían atravesar la platanera
para ir a buscar la droga
en el poblado de más abajo
pese a que sus madres
supiesen lo que hacían
Foto y texto inédito de Voltios.
21 comentarios:
querido amigo que nostalgias de ese "campito" como llamábamos aquí a un lugar como el que describes, nuestras madres también nos prohibían ir,ahora por la pauperisacion de las poblaciones urbanas y hacinamiento ya no existen, gracias por tan nostálgico poema. te abrazo
Dices: golpeando con saña almas débiles...
Y salpica la sangre mi rostro al leerlo.
Dices: no volví a pisarla
Y yo irremediablemente me alegro.
Mi chico, como mezclas la ternura y la crudeza, me encanta.
Un abrazo
Buen poema Ángel. Me encanta el final.
Un abrazo.
Hola, gracias por el link y un abrazo. Espero verte en mi vino el 23.
Ultramarinos... Ya ni me acordaba. De las madres silenciosas, sí.
Es la realidad, es la vida, la vida dura...
los solares vacíos de ayer son los edificios altos de hoy
muy bueno ángel, pasa un bonito finde
Buen poema saludos!
Me pellizca la realidad de nuevo en esta mañana con un sol currándoselo por estar presente, y esa realidad como es habitual se llama Ángel Rodríguez, "Voltios" Gracias.
Arrumacos.
Eliminaré, no por su contenido, pues él solito se delata el muy cobarde, los comentarios anónimos como he hecho, acaso adolfo, te da miedo dar la cara y que se sepa que eres tu? Ya te lo dije macho, si lo que lees no te gusta.... puerta.
Y no me toques mucho las narices que soy hombre de poca paciencia y muy mala hostia.
de nada abuela, gracias a ti por seguir apareciendo en este mi blog y dejarme tus nostalgias también. mil abrazos.
calipso... esto, paz me gusta ese comentario de mezclar crudeza y ternura, si te soy honesto no pretendía lograr eso, o al menos no era mi finalidad, era soltar esta historia que llevaba dentro desde peke, pero es cierto, se aunan dureza y ternura.
un besote.
Gracias mil señor belinchón, me alegro que te guste el poema y su final, jejeje. un fuerte abrazo amigo.
No tengas dudas juan de que haré lo posible e imposible por ir a tu vino, y gracias por pasarte por mi blog a saludar.
suena tan antiguo lo de ultramarinos a época de "cuéntame..." y demás que parece no existiesen, pero hubo un tiempo en el que sí, maestro zuñi.
un fuerte abrazo y te reitero las gracias por colgarme en tu otro blog.
pues sí alfaro, no sé contar las cosas ni hacer poesía de otra manera, al menos de momento.
gracias ana, y sí las constructoras, la malversación de fondos y todas esas cosas que escuchamos en la tele, como también la especulación urbanística y demás, terminaron con nuestros solares.
un beso y buen finde para ti también.
gracias rémora, muchas gracias, me alegra verte por aki y que te guste lo que hago.
a ti bego, mil gracias a ti, como he dicho en el post de más arriba, no sé hacer poesía de otro modo. un fuerte abrazo guapa.
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